A las afueras de la histórica ciudad de Martos, se extiende un paraje que, a simple vista, podría parecer uno más en el mosaico urbano de la localidad. Sin embargo, bajo los cimientos de lo que un día fue una fábrica orujera, hoy ya muy revueltos, se esconden miles de años de historia humana, desde la Prehistoria más remota hasta épocas recientes. Allí, en el área conocida como Los Pilares,

Vista aérea del enclave arqueológico de Los Pilares de Martos
Época Histórica IV milenio a.C.- Contemporánea
Estado de Conservación Malo
Valoración Invaluable
Nivel de Protección
  • Zona Arqueológica (ZAPM)
  • B.I.C.

Martos. En los terrenos de la vieja orujera Esmarsa, han aflorado más de cinco milenos de historia que quedarán resguardados bajo las nuevas construcciones.

A las afueras de la histórica ciudad de Martos, se extiende un paraje que, a simple vista, podría parecer uno más en el mosaico urbano de la localidad. Sin embargo, bajo los cimientos de lo que un día fue una fábrica orujera, hoy ya muy revueltos, se esconden miles de años de historia humana, desde la Prehistoria más remota hasta épocas recientes. Allí, en el área conocida como Los Pilares, las intervenciones arqueológicas preventivas motivadas por un proyecto urbanístico, han abierto una ventana fascinante hacia un rico pasado que nos invita a reflexionar sobre cómo gestionamos el legado de aquellos que nos precedieron en la historia.

"Una ventana fascinante hacia un rico pasado que nos invita a reflexionar sobre cómo gestionamos el legado de aquellos que nos precedieron en la historia."

El terreno, una suave loma que desciende hasta el arroyo Fuente de la Villa, ha sido un espacio atractivo durante milenios para el asentamiento humano. Su ubicación estratégica, con suelos fértiles —arcillosos, margo calizos y silíceos—, y la abundancia de agua por la confluencia también del arroyo de La Alberquilla, actualmente desaparecido, ofrecía unas condiciones inmejorables para la vida y el desarrollo de diversas actividades. Desde finales del IV milenio a.C., en el Neolítico, algunas comunidades vieron este paraje como el lugar perfecto en el que construir sus hogares.

Vista aérea de Los Pilares de Martos, con la Peña al fondo
Vista aérea del paraje de Los Pilares, junto al Polideportivo de Martos. © Ruipersol, S.L.

NUMEROSAS CAPAS DE HISTORIA BAJO LA INDUSTRIA ORUJERA

La investigación arqueológica en Los Pilares —sufragada en su mayoría por RUIPERSOL S.L. debido al interés urbanístico — ha sacado a la luz distintas realidades superpuestas, como si de las capas de una tarta se tratase. Con cada sondeo, cada metro excavado, se ha escrito una página más en el gran libro de la historia de este enclave. Se han identificado principalmente cuatro grandes periodos de ocupación: el Contemporáneo, el Medieval, el Romano y el Neolítico.

La capa más reciente nos habla de la actividad industrial que marcó el paisaje durante buena parte del siglo XX, con la implantación de la orujera. Sus estructuras, balsas, hornos y edificios alteraron profundamente el terreno, dejando una huella imborrable y niveles de expolio brutales, con la connivencia de las distintas administraciones, de lo cual existen numerosos testimonios.

"Niveles de expolio brutales, con la connivencia de las distintas administraciones."

El periodo medieval, aunque presente, se manifiesta principalmente a través de restos cerámicos dispersos y algunas estructuras murarias fragmentadas, a menudo mezcladas con vestigios romanos, lo que sugiere una ocupación menos intensa o cuyos restos fueron afectados por etapas posteriores.

Sin embargo, la época romana, emerge con gran fuerza. Los arqueólogos han documentado restos de lo que parece ser un importante complejo residencial: una “villae” que tuvo varias fases de ocupación entre el siglo I a. C. y bien entrado el siglo IV d. C. Algunas de las estructuras que más destacan son las de un posible patio porticado —del que se conservan algunas basas de columnas— con impluvium (estanque central para recoger el agua de lluvia), sistemas de drenaje y canalizaciones de tipo hidráulico que ponen de manifiesto un sofisticado manejo del agua. Se han encontrado suelos de guijarros, baldosas decoradas, restos de estucos policromados y hasta restos de teselas que apuntan a la existencia de mosaicos —algo confirmado por testimonios que señalan la extracción de algunos fragmentos en los años 90, durante la construcción de una de las balsas de alperujo—.

Pero si hay una etapa que ha sorprendido por la riqueza y abundancia de vestigios —los menos alterados por la actividad industrial—, esa ha sido la neolítica. Prácticamente en toda la parcela han aparecido numerosas fosas excavadas en la matriz geológica. Estas estructuras, de diversas formas y tamaños, cumplieron múltiples funciones: desde fondos de cabaña o áreas de actividad doméstica hasta lugares de enterramiento y fosos que podrían tener funciones defensivas o de delimitación espacial dentro del poblado. Se han recuperado abundantes materiales cerámicos hechos a mano, útiles líticos de sílex (cuchillos, puntas de flecha, raspadores), restos de fauna, e incluso indicios de rituales funerarios. Destaca el descubrimiento de la sepultura de una joven de unos 17-20 años, cuyos restos presentaban indicios de una salud muy precaria, con problemas como anemia o infección por parásitos intestinales: hasta ahora, un caso documentado único en la Península Ibérica.

"Un caso documentado único en la Península Ibérica."
Enterramiento Neolítico en Los Pilares de Martos
Enterramiento de época neolítica en Los Pilares de Martos. © CS, J.

EL DIFÍCIL EQUILIBRIO ENTRE LA CONSERVACIÓN Y EL URBANISMO

La aparición de un yacimiento de esta magnitud plantea un desafío significativo: integrar la riqueza del pasado con las necesidades del presente y el futuro desarrollo urbanístico. La legislación de patrimonio histórico establece la obligatoriedad de la intervención arqueológica previa en zonas protegidas, como la Zona Arqueológica del Polideportivo de Martos, de la que Los Pilares forma parte y que tiene la consideración de BIC. El objetivo principal de estas intervenciones es documentar el potencial arqueológico y proponer medidas para su conservación.

En el caso de Los Pilares, las resoluciones de la Delegación Territorial de Cultura de Jaén consultadas han dictaminado “la conservación in situ, bajo las futuras construcciones”, de algunas de las estructuras romanas, como un interesantísimo pozo —de bloques verdosos amarillentos de arenisca— y algunas partes de la villae. Esta conservación se realizaría “mediante la protección de los restos con geotextil y el aporte de arena y grava”, contemplando la realización de un control arqueológico durante los movimientos de tierra restantes, para asegurar la documentación de otros posibles hallazgos.

“La conservación in situ, bajo las futuras construcciones, mediante la protección de los restos con geotextil y el aporte de arena y grava.”

UNA MIRADA CRÍTICA: ENTRE LO HALLADO Y LO CONSERVADO BAJO LAS CONSTRUCCIONES

Es en el balance entre lo descubierto y lo que finalmente se decide conservar donde surge la reflexión más crítica. Los distintos informes arqueológicos destacan la importancia y extensión de los restos hallados, especialmente los del neolítico y romanos, y en un primer momento, se planteó la conservación y puesta en valor de las estructuras asociadas a la villae, incluida la cámara hipocausta de la supuesta zona de baños (balneum) que sería trasladada de lugar para “salvar su integridad”. Sin embargo, en resoluciones posteriores, se observa un cambio de criterio respecto a todas ellas.

"Los restos interpretados inicialmente como parte de un hipocaustum, presentan cierta desconexión con la villa y un estado de conservación bastante precario agudizado en los últimos años" —según Sánchez Susí, director de los últimos trabajos arqueológicos—, por lo que, finalmente, se propone el levantamiento fotogramétrico y modelo 3D en lugar de su traslado o conservación in situ. Aunque se argumenta correctamente la parcialidad y deterioro de los restos, y la complejidad y coste de su traslado para una puesta en valor comprensible para el público en general, la decisión de no conservar físicamente esta estructura —si bien es cierto que no todos los restos pueden ni deben conservarse, máxime en situaciones de este tipo— no es más que el resultado de esa “tensión” entre el desarrollo urbanístico y la protección del patrimonio, un debate constante en la gestión de los bienes culturales.

Restos de época romana en Los Pilares de Martos
Diversos restos de época romana en Los Pilares de Martos. Destacan los vestigios del patio porticado. © CS, J.

No solo existe un cambio de criterio en el supuesto balneum o la cámara hipocausta, también lo hay con los restos asociados a la villa, que ya no contarán con un programa de puesta en valor. De la última resolución se desprende que “se conservarán in situ bajo las futuras construcciones, mediante capas de geotextil, gravas y zahorras hasta llegar íntegra y completamente a su nivel superficial o techo arqueológico”.

“Se conservarán in situ bajo las futuras construcciones, mediante capas de geotextil, gravas y zahorras hasta llegar íntegra y completamente a su nivel superficial o techo arqueológico.”

LOS PILARES: MÁS HORMIGÓN Y LADRILLO PARA LA ZAPM

El yacimiento excavado en Los Pilares de Martos ha demostrado guardar un tesoro arqueológico que se remonta a la Prehistoria y que tuvo gran relevancia en época romana. La labor de los arqueólogos ha sido fundamental en este proceso —también de la empresa promotora, que ha asumido los costes—, rescatando del olvido todas estas evidencias que se suman a la compleja ZAPM. Sin embargo, desde una perspectiva personal, las decisiones en favor del desarrollo, no honran este rico pasado. La conservación y protección bajo aceras, zonas verdes o edificios, garantizan su preservación física, pero ¿dónde queda la transmisión de la importancia de este lugar a las futuras generaciones?

La documentación generada y los materiales recopilados, servirán de base para futuras investigaciones, y, posiblemente, para ampliar el conocimiento de este rincón de la ciudad de Martos. Sin embargo, todo permanece en el ámbito académico y profesional, sin llegar al público general ni a futuros visitantes, que continuarán en la mayor ignorancia —y quizás desprecio— hacia su propia historia y la de sus antepasados.

"Todo permanece en el ámbito académico y profesional, sin llegar al público general ni a futuros visitantes, que continuarán en la mayor ignorancia —y quizás desprecio— hacia su propia historia y la de sus antepasados."

Hemos analizado y valorado con objetividad los datos contenidos en los informes, y así se los hemos transmitido. Desde esta morada les invitamos a conocer el enclave arqueológico de la Básilica Paleocristiana como único elemento puesto en valor en los miles de metros cuadrados que ocupa el Yacimiento del Polideportivo de Martos, así como el caso de la Villa Romana del Apero, un claro ejemplo de atentado contra el patrimonio y de allanar el camino para el sector inmobiliario.

Enterramiento Neolítico en Los Pilares de Martos
Estado en el que se encontraban algunos de los restos arqueológicos hace dos años. IA a partir de fotografía original.

Suscríbete a nuestro Canal de Whatsapp y síguenos en Facebook para recibir nuestras últimas entradas y publicaciones.

Galería fotográfica

Restos de una gran piscina enlucida con opus signinum en la villae de los Pilares de Martos
Detalle de basa de columna del patio porticado de la villae descubierta en Los PiLares de Martos
Restos del impluvium de la villae de Los Pilares de Martos y canalizaciones de agua
Vestigios del patio porticado de la villae romana de Los Pilares de Martos
Muros de estancias de la villae romana de Los Pilares de Martos
Pozo romano, asociado a una villae, hallado en Los Pilares de Martos
Pozo romano, asociado a una villae, hallado en Los Pilares de Martos, no excavado en su totalidad por seguridad
Excavación arqueológica de la fase romana en Los Pilares de la Zona Arqueológica del Polideportivo de Martos
Estructuras neolíticas encontradas en el área de Los Pilares de Martos
Estructura circular excavada en la roca, de origen neolítico, de Los Pilares de Martos
Conjunto de estructuras hidráulicas de las villae romana de Los Pilares de Martos
Otra estructura circular excavada en la matriz rocosa correspondiente a la Zona Arqueológica del Polideportivo de Martos


Referencias
  • Sánchez Susí, R., Manzano Castillo, A., Martínez Ocaña, J. L. y Repullo Roldán, C. (2007): "Estudio Preliminar I.A.P. en S.U.N.P. R2, "Los Pilares", ZAPM, Martos (Jaén) ".
  • Manzano Castillo, A., Martínez Ocaña, J.L. y Sánchez Susí, Rafael (2022): "Intervención Arqueológica Preventiva, Excavación Arqueológica Extensiva en parcela SU-NC R4, "Los Pilares", ZAPM, Martos (Jaén)".
  • Resolución de la D.T. de Cultura y Patrimonio Histórico en Jaén sobre Actividad Arqueológica Preventiva en Parcela SU-NC-R4 "Los Pilares" ZAPM, Martos (Jaén). 9 de noviembre de 2021.
  • Resolución de la D.T. de Cultura y Patrimonio Histórico en Jaén sobre Actividad Arqueológica Preventiva en Parcela SU-NC-R4 "Los Pilares" ZAPM, Martos (Jaén). 7 de octubre de 2019.
  • Vacas, Constanza (2025): "La primera "española" con lombrices intestinales: salen a la luz parásitos de hace 5.500 años". Revista National Geographic.